La solemne celebración de Damián 2024 en la Capilla de San Antonio de Lovaina fue presidida por el nuevo arzobispo de Malinas-Bruselas, monseñor Luc Terlinden, en concelebración con el rector de la iglesia, el padre Ferry Indrianto sscc y el nuevo Superior de la delegación, Juan Carlos Tinjacá sscc.
Tras la celebración de la eucaristía, los Padres de los Sagrados Corazones entregaron el "Premio Damián" anual, que este año recayó en la parroquia de Saint-François de Lovaina, donde los feligreses están cerca de las personas necesitadas y las apoyan con todo tipo de iniciativas a lo largo del año.
Premio Damián
"Damián dio su vida por los demás y lo hizo ocupándose de las cosas más sencillas, como las canicas para los huérfanos de Molokai. De eso trata hoy el Premio Damián. Devolver con cosas sencillas y hacer feliz a la gente por lo que es. Siempre nos interesan los proyectos dirigidos por voluntarios a pequeña escala. Pequeñas iniciativas que aportan mucha felicidad a las personas que se benefician de ellas. El Premio Damián se concede a personas que hacen felices a los demás, a personas vulnerables, a personas que no cuentan en nuestra sociedad o que están en dificultades", dijo el padre Juan Carlos Tinjacá, Superior de la delegación flamenca de los Padres de los Sagrados Corazones.
El Premio Damián es una obra de bronce de Damián creada por el artista de Lovaina Willy Peeters.
La parroquia de Saint-Francois (Lovaina)
El Premio Damián 2024 se concede al proyecto de la parroquia de Saint-François de Lovaina. Se describe a sí misma de la siguiente manera: "No somos una parroquia grande, sino una parroquia que intenta tener su corazón en el lugar adecuado. Para ello, no sólo nos acercamos a los feligreses, sino también, desde hace algunos años, a personas de fuera de la parroquia. De cocinar durante las vacaciones, ahora cocinamos del 1 de noviembre al 1 de abril. Este período corresponde a la apertura del albergue nocturno. Queremos echar una mano a las personas con dificultades de nuestra propia ciudad. Lo hacemos concretamente ofreciendo comidas a los sin techo, recogiendo paquetes de comida, recogiendo ropa durante la Cuaresma, acompañando a una familia de refugiados, vendiendo productos en ayuda del albergue de refugiados de Winksele o Aarschot, apoyando el bar Michotte (los viernes, la gente puede reunirse y comer en el salón parroquial, con la ayuda de personas discapacitadas de Lovenjoel). Son pequeñas iniciativas que tienen sentido para determinados grupos destinatarios cuya vida no siempre es fácil. Y como equipo parroquial, creemos que eso es muy importante. Y sí, sin duda es algo que se corresponde bien con lo que habría querido el propio Padre Damián".
En muchos sentidos, este equipo de proyecto de la parroquia de Saint-François de Lovaina sigue los pasos de Damián. A través de muchas iniciativas modestas y útiles, apoyan a sus allegados. "Por eso hoy, nosotros, los Padres de los Sagrados Corazones, hermanos de Damián, queremos darles las gracias por su trabajo desinteresado y su ejemplo ejemplar. Gracias a la gente de la parroquia de Saint-François porque, en palabras del obispo Terlinden, habéis encontrado vuestro Molokai en los pobres, los pequeños, los marginados de Lovaina y sus alrededores. Sois unos magníficos y merecidos ganadores del Premio Damián 2024", dijo el padre Juan Carlos Tinjaca, superior de la delegación flamenca de los Padres de los Sagrados Corazones.
Tras la ceremonia, nos dirigimos a la cripta cercana a la tumba del Padre Damián para guardar un momento de silencio y de acción de gracias.
La celebración terminó con una breve recepción. El arzobispo se quedó a comer en la comunidad.
Enlace a la galería fotográfica: https://photos.app.goo.gl/SKh4sFbpWWkeJFvp7
14/05/2024