En la noche de la Nochebuena las comunidades de hermanos y hermanas de Roma se han reunido en casa de los hermanos. Primero, han celebrado la eucaristía, presidida por el Superior General, Alberto Toutin que, en su homilía, nos ha recordado que “el Dios celoso no solamente ama por entero”, sino que “Él mismo es el contenido de esa esperanza”. Luego, ha señalado cómo “cuenta con nosotros como con el Niño Jesús que aprendió de nuestra humanidad o como los Fundadores que decidieron fundar una congregación de celadores para colaborar en la obra de Dios”. “¿Para quién es el Dios ‘celoso’?”, (nos plantea Alberto): “para un pueblo que camina en tinieblas” o “para pastores que están cuidando de noche su rebaño”. En este clima de noche de la gran esperanza y del nacimiento hemos renovado nuestra profesión religiosa. Han estado especialmente presentes las víctimas del tsunami en Indonesia y el conflicto que se vive en la actualidad en el Congo. Tras la eucaristía, foto de familia y cena que ha culminado con villancicos en varias lenguas.
25/12/2018