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La comunidad provincial de México tuvo su retiro anual del 13 al 16 de enero en la casa de las Carmelitas misioneras de santa Teresa en Tetelcingo, Morelos (México). Los acompañó el provincial de Chile, Sandro Mancilla, quien a partir de seis motivaciones ayudó a los hermanos de México a mirar con mayor hondura el proceso de reestructuración que están viviendo.
Sandro no dejó de invitar al silencio, como actitud prioritaria para escuchar a Dios. Invitó a los hermanos a reconocer que el Espíritu sopla donde quiere, por tanto, habrá que estar abiertos a la novedad de Dios. La escucha tiene como correlato una Palabra que afecta antes que a la voluntad, a la imaginación. Al hacer hincapié en esto invitó a los hermanos a dejarse impactar por la Palabra de Dios, como Palabra que abre siempre mundos nuevos, pues la Palabra no se queda en el ámbito legislativo o prescriptivo. Es Palabra que da vida.
Finalmente, presentó algunos datos importantes sobre las diferencias generacionales, para ayudar a los hermanos a comprender mejor las dinámicas que se desarrollan en cada grupo generacional y la cultura que cada grupo tiene. Esto con el fin de reflexionar más sobre lo que tenemos que entender los unos de los otros para caminar en la reestructuración.
La tarde del jueves 16 y la mañana del viernes 17 los hermanos trabajaron con un informe dado por el equipo Cruces. Este equipo ha estado acompañando el proceso de reestructuración provincial desde octubre de 2024. El informe es fruto de un diálogo que este equipo realizó con cada comunidad durante los meses de octubre a diciembre. Refleja diversas esperanzas y temores ante los cambios que se propuso la provincia en su XVII Capítulo Provincial.
En la misa de conclusión del retiro y la asamblea provincial, los hermanos agradecieron a Dios por lo vivido y por los valiosos aportes de Sandro y del equipo Cruces. Y también dieron gracias a Dios y pidieron por la inminente profesión temporal de Jesús David Granadeño Ramírez, que se celebraría al día siguiente.
21/01/2025