Terminando la visita en las comunidades y obras de Paraguay, regresamos a Chile, tomamos un día de descanso y partimos hacia el sur para iniciar con la comunidad San José de Pemuco, que lleva pocos meses de su fundación y con la experiencia nueva de ser las “párrocas” en esa iglesia local, nombradas por nuestro hermano Obispo Sergio Pérez de Arce.
Así de sur a norte fuimos visitando las Comunidades de El Carmen, San Javier; en Santiago la comunidad de la Buena Madre y Cleónisse. Luego nos fuimos a la costa, comenzando con la comunidad de las hermanas mayores en Santa Inés y la del Corazón de María, estas dos quedan en Viña del Mar. Más al interior tenemos la comunidad Buen Padre, en Limache.
Ha sido muy grato el compartir con las hermanas, estaban muy preparadas para la visita y compartirnos lo que están viviendo, sus proyectos comunitarios, participamos en algunos encuentros y celebraciones
En Chile hay 4 colegios, en todos ellos nos hemos encontrado con los Equipos Directivos, donde nos han compartido la difícil experiencia que se tuvo que vivir en los años de pandemia, de improviso gestionar la manera de dar respuesta para la atención con alumnos, familias, profesores y personal en general en todos los desafíos que se presentaron. Y este año, los cuatro colegios, atienden a los alumnos en forma presencial y muy desafiados para, creativamente atenderlos en todas las consecuencias que ha dejado la pandemia, en su conducta, en lo emocional y mental, tanto con los alumnos, en sus padres y en los profesores.
Otra obra es la Fundación de Beneficencia SS.CC. que acoge a adultos mayores y tiene un jardín infantil, que atiende niños, desde bebés de meses hasta preescolar, en unas hermosas dependencias para acogerlos y atenderlos en todas sus necesidades.
También nos encontramos con comunidades de la Rama Secular, la mayoría están volviendo a reunirse en forma presencial, continuando con su formación y poder actualizar la renovación de sus compromisos.
18/06/2022