Queridos Hermanos (as)
“Ven Señor Jesús” es la oración de la Iglesia en la liturgia de Adviento. Esta llamada fue escuchada por Sor claire Tropé el 19 de diciembre de 2011.
Su vida apacible en la Residencia de la Grand Maison, nos hizo esperar que gozaríamos de su presencia un largo tiempo aún.
Lucienne, Henriette-Marie, nació el 20 de febrero de 1920 en Chennevilliers de la región parisina. Hija muy amada por sus padres - grandes cristianos - y hermana muy querida también de sus dos hermanos.
Lucienne toma contacto con la Congregación de los Sagrados Corazones cuando cursaba en la Escuela normal de Versailles.
Desde su llegada al postulantado en 1942, Lucienne recibió el nombre de Sor Claire que ella siempre amó. Poco después recibe en Picpus a Anne-Marie Caron, una buena amiga y compañera de la escuela de Versailles. Las dos se reencontrarán algunos años más tarde y juntas colaborarán, sobre todo en el dominio de la educación y de la animación de nuestras comunidades.
Antes de haber hecho sus votos perpetuos en la Congregación – el 4 de agosto de 1948 en París - Sor Claire fue enviada a fundar y dirigir una escuela en Verpillière – Isere donde permaneció unos 12 años.
De allí pasó a Chartres donde ejerció de maestra de pensionado. El servicio de superiora le fue confiado sucesivamente en Laval, Chartres, Rennes, Boissy St. Léger, St. Servan y Dreux.. Por donde pasó Sor Clara mostró el mismo gran deseo de hacer felices a sus hermanas y de ayudarles a vivir con ardor su vocación de religiosas de los Sagrados Corazones.
Sor Clara era un alma universal: sus muchas capacidades y su gran curiosidad intelectual hicieron de ella una gran lectora. Todo le interesaba…incluso en los últimos tiempos; sobre su escritorio podían verse desde libros de historia, novelas, hasta libros de teología, incluso bastante especializados.
Entre los apostolados de Sor Clara estaba el de su pertenencia al movimiento carismático y sobre todo lo que ella amó por encima de todo: la visita a los presos de Fleury-Mérogis y la correspondencia con ellos.
Durante el verano pasado recibió en la Grand Maison a un antiguo preso con su compañera, llenos de agradecimiento. ¡Cuántas confidencias recibidas y llevadas a la oración!
El acompañamiento de miembros de la Asociación Exterior fue otro servicio que apasionaba a Sor Clara. Recordamos el Boletín “Ágape” que ella confeccionaba con amor, ayudaba por algunas socias fieles.
Y luego los Cursos de Biblia…Los preparaba con minucia, los impartía con pasión y se regocijaba oyendo cómo sus “alumnos” se volvían entusiastas del Antiguo y del Nuevo Testamento. Hojear, gustar, enseñar los textos bíblicos le permitieron hermosos encuentros, difíciles de dejarlos después cuando el peso de los años la alcanzó.
Sor Clara llegó a la Grand Maison hace 15 años en ocasión de su jubilación, pero no fue una jubilación inactiva. Tenía la correspondencia suya y de las hermanas que tenían necesidad de una secretaria. Los libros, los contactos, incluso costándole ver cómo sus fuerzas y su capacidad disminuían, su vejez fue bella y fecunda.- Nuestra querida hermana recibió muchos testimonios de afecto de su familia y de numerosos viejos fieles amigos.
He aquí algunas líneas escritas por ella misma y dirigidas a sus Hermanas de Comunidad:
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“Si me llega a ocurrir un accidente, ofrezco un afectuoso recuerdo a cada una de mis hermanas, les pido que me perdonen las preocupaciones que les causo, sobre todo la pena que he podido causarles en lo cotidiano de la vida…Me hubiera gustado ser para ellas un canal de Dios, un canal de santidad y de felicidad…Quizás podría ser ahora ese canal de diferente manera…que a través de María, os acompañen la ternura de Dios Padre ,del Hijo, y del Espíritu todos los días…"
Vuestra Hermana Claire
Feliz de ser religiosa de los Sagrados Corazones
¡Dios es amor!
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Claire, de todo corazón, te decimos gracias por tu vida, por tu vocación, por lo que has sido para nosotras!
Y con vosotros, hermanos y hermanas, nuestro corazón unidos en acción de gracias, y nuestra “oración por los difuntos” que se actualiza todos los días en la Eucaristía.
Jeanne Cadiou ss.cc y Marie-Hélène Granjon ss.cc.
19/12/2011