La celebración de los 200 años de la aprobación pontificia de la Congregación se ha vivido en Picpus con un sabor especial. En la mañana del 10 de enero, en la capilla de Picpus se celebró la eucaristía presidida por el Superior General, Javier Álvarez-Ossorio sscc, concelebrada por numerosos hermanos de la región de París y por los sacerdotes diocesanos encargados de la Casa San Agustín (propedéutico). Naturalmente estuvieron presentes las hermanas sscc de la zona de París, también Goyi Marín sscc del gobierno general, y algunos miembros de la Rama secular y amigos de la Congregación.
La celebración comenzó con el saludo de acogida por parte de Christian Malrieu sscc, provincial de Francia, y con la lectura del decreto de aprobación de la Congregación.
Javier en su homilía invitó vivir con gran alegría y humildad este momento. La primera lectura del día nos recuerda que Jesús no se avergüenza de llamarnos hermanos, a pesar de conocernos bien, y nos lleva a la perfección mediante el sufrimiento, entrando en el sufrimiento interior del Corazón de Jesús, en el sufrimiento que estuvo presente en aquellos primeros momentos de la Congregación y el sufrimiento de la humanidad hoy día. El evangelio del día nos recuerda el combate espiritual contra el mal, presente en cada uno de nosotros y en nuestro mundo.
Tras la misa se tomó un aperitivo en la comunidad de las hermanas y el almuerzo en la comunidad de los hermanos. Algo más de 30 hermanos y hermanas, algunos miembros de la Rama Secular, reunidos para celebrar y agradecer la bondad de Dios.
11/01/2017