"En Jesús encontramos todo"

CONGREGACIÓN DE LOS SAGRADOS CORAZONES
de JESÚS y de MARÍA
Gobiernos Generales de Hermanos y Hermanas, Roma

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† Hna. María Antonia VELASCO sscc (España)

   Queridas Hermanas:
 
   El sábado, 28 de marzo, a las 6 de la mañana, nuestra hermana María Antonia Velasco exhalaba su último suspiro, consumando así la entrega definitiva de su vida en manos del Padre. Eso ha sido su vida como Hija de los Sagrados Corazones: entrega fiel y gozosa, generosa, nunca desmentida, un “Fiat” sin condiciones a cuanto el Señor ha ido pidiendo de ella.
 
   Había nacido en Madrid, el 11 de marzo de 1916. Fue alumna de nuestro colegio de Fuencarral. Al comenzar la guerra civil del 1936, sus padres desaparecieron: habían salido por la mañana para hacer la cola del pan… ¡y nunca volvieron! Un amigo de la familia fue el último que los vió por la calle, rodeados por el pelotón que los había hecho presos que gritaba “que los maten, que son fascistas, que llevan un Cristo” Para Mª Antonia y sus hermanos siguió un prolongado y dolorosísimo tiempo de inútil búsqueda de unos padres tan queridos. A partir de ese momento ella se dedica con inmenso cariño y sentido de responsabilidad al cuidado de sus hermanos.
 
   El 9 de Julio de 1942 inicia sus postulantado en nuestra casa de Fuencarral. Seguidamente pasa a El Escorial donde hace su noviciado y pronuncia sus primeros votos el 24 de septiembre de 1944. Tras un breve tiempo dedicado a la enseñanza, es destinada a nuestra residencia “Regina Pacis” para hacerse cargo de las jóvenes universitarias.
 
   El 17 de febrero de 1948 hace sus votos perpetuos en Picpus. Al volver a España comienza para ella una larga etapa entregada a servicios de gobierno, primero como superiora de las comunidades de “Regina Pacis” (1948-1954) y Torrelavega (1954-1960). Y desde 1960 hasta enero de 1971 como provincial de la Provincia de España. Su mandato señala para nuestra provincia un tiempo fuerte con dos ejes muy importantes: un tiempo de renovación intensa siguiendo las orientaciones de Vaticano II y un tiempo de expansión misionera con las fundaciones de Paraguay (1965) y Congo (1969). Asimismo, en el interior de la provincia, promueve un nuevo estilo comunidades, con el acento puesto en la comunión y relación de personas. De este momento datan las fundaciones de Jaraiz de la Vera y Jerez de la Frontera. También se funda Cádiz donde empezamos la colaboración con nuestros Hermanos.
 
   Al terminar su mandato como provincial y después de un tiempo dedicado a la formación de las Junioras, es nombrada el Ecónoma provincial, cargo en el que desplegó un gran talento práctico que logró poner – como todo en su vida - al servicio de la comunión y del Reino.
 
   A sus 71 años se ofrece voluntariamente para la fundación de Lisboa. Nuestros Hermanos, que desarrollaban allí una intensa labor social, habían pedido la colaboración de las Hermanas para la Residencia de mujeres. Fue para Mª Antonia una verdadera felicidad “lanzarse al agua” de un mundo nuevo y desconocido pero sumamente amado por ella: el mundo de la pobreza, hecho en este caso realidad concreta en sus queridas ancianas desamparadas
 
   En 1997 se le pide que deje Portugal para incorporarse a la comunidad de Jaraiz. Allí pasa seis años dedicada a sus hermanas de comunidad y a la enfermería de los niños, poniendo en ello el mismo entusiasmo y cariño que ha ido poniendo en cada paso y gesto de su larga vida. Como solía repetir “el amor hay que estrenarlo cada día”.
 
   En 2004, llega por fin la etapa del descanso en la Enfermería de El Escorial. Sus fuerzas van decayendo, su memoria se va borrando… pero ella sigue siempre preocupada por los demás, por “atender a quien viene a visitarnos”, por “dar algo a los obreros que están trabajando en la casa”… Y, muy especialmente, por entregar su tiempo - larguísimas horas - a la adoración ante el Santísimo.
 
   También el movimiento la ha ido abandonando. En sus últimos meses, son muchas las horas de quietud, de oración, de contemplación del paisaje que ha pasado en el sillón o en su silla de ruedas ante la ventana de su cuarto. Pero con impresionante paz, sin exigir nada, sin quejarse de nada, agradeciendo el cuidado y atenciones que recibía por parte de quienes la han cuidado con tanta delicadeza y esmero.
 
   Su peculiar estilo, su original manera de ser y de hacer traslucían carisma SS.CC. y muy cercano parentesco de familia con nuestros Fundadores. Todo lo referente a la Congregación le ha interesado siempre y mucho: las hermanas de otras provincias, la evolución de Provincias y Comunidades, los PPC…
 
   Mª Antonia ha pasado entre nosotras “haciendo el bien”, Nos ha enseñado compromiso visceral con el Evangelio de Jesús, con su Corazón compasivo y misericordioso... Su vida nos ha hablado siempre de fidelidad, de perseverancia, de coherencia, de desprendimiento, de buen humor. Mujer de profundas y arraigadas convicciones ha acertado a darles forma en cada etapa, a través de una gran flexibilidad y capacidad de adaptación a lo nuevo .En ella se ha ido haciendo verdad cada día lo que prometió en el momento de su profesión: “... hermana de la Congregación de los Sagrados Corazones de Jesús y de María a cuyo servicio quiero vivir y morir”.
 
   La Comunidad de El Escorial os está siempre muy fraternalmente unida in SS.CC. En su nombre os lo dice.
 
 
 
María Paloma Aguirre ss.cc.

28/03/2009